Detalles.- Octubre es el mes ideal para hablar sobre cosas que son usualmente consideradas como “terroríficas”, como por ejemplo, de la tabla Ouija (la RAE nos regañó, porque se escribe güija).
¿Alguien no ha escuchado una historia sobre esta tablita?
Buena parte de las historias de miedo comienzan con una tabla llena de letras, un puntero y un grupo de jóvenes e inocentes criaturas que se reúnen para comunicarse con el más allá.
Sus supuestos poderes para comunicarse con personas del más allá la han convertido en un objeto místico, e incluso prohibido en algunas ocasiones por colegios y religiones más conservadoras. Lo que provoca que se despierte más el interés.
Aquí en VoxBox creemos que es necesario conocer cómo funciona, por si alguna vez intentas comunicarte con algún pariente para preguntarle por la herencia o cositas por el estilo… no, ya, en serio, la güija es una farsa.
¿Cómo funciona la tabla de la tabla Ouija realmente?
La güija opera con un grupo de personas colocando un dedo sobre una suerte de flecha de madera que posee un agujero que se posa sobre cualquiera de las letras, números o símbolos de la tabla.
La concentración de todos los miembros de la mesa con su dedo apuntando al mismo lugar hace que las energías del más allá muevan esta flecha, permitiendo que el espíritu converse con las personas.
Si no es un bromista del grupo, la causa del movimiento es nuestro propio inconsciente, en un efecto que en psicología se denomina efecto ideomotor.
Este efecto hace que una persona haga movimientos de manera automática y sin quererlo, respondiendo a ideas o emociones del momento.
Mientras más uno crea en la güija, más se sugestionará a la mente para que realice los movimientos, y por ende, todos terminan formando parte de un gran autoengaño.
De allí que todos nieguen que estaban moviendo el puntero, pues, en realidad, no lo hacen de manera consciente, y basta con que algunos lo hagan para que el resto siga el curso.
El origen del mal
Lo más terrorífico de la tablita es su origen comercial. Sí, a pesar de que la tabla se puede basar en antiguas tradiciones chinas, la tabla de la ouija, como la conocemos, fue introducida al mercado de Estados Unidos por un negociante llamado Elijah Bond, en 1890.
Sí, la güija es un instrumento de comunicación tan místico, que recibió una patente de invención y comercialización en 1891.
El nombre Ouija
Proviene de la combinación de las palabras “Oui” y “Ja”, que significan “sí” en francés y alemán respectivamente, y no tienen ningún otro significado místico.
La tabla comenzó a venderse entonces con propiedades esotéricas añadidas, simplemente para poder vender más unidades y hacer más ricos a sus inventores.
En 1966, sus dueños originales vendieron la licencia del producto y el negocio a Parker Brothers, y en 1991 la marca pasó a ser parte de Hasbro.
Todas, por si no se han dado cuenta, compañías de juguetes.
Por lo que cada historia extraña que escuchen sobre la güija no es más que parte de la campaña, para darle más misticismo a un producto que de sobrenatural no tiene nada.
¿Y las dos películas de la serie La Ouija, lanzadas en 2014 y 2016?
También son parte de Hasbro Films.
Por si te queda alguna duda de que todo es una farsa, puedes comprarte una güija en tu juguetería favorita, invitar a tus amigos y contarnos tu experiencia.