Detalles.- En la era victoriana del Imperio Británico, estaba mal visto que los hombres se quitaran sus sacos fuera de sus propias casas. Hacerlo implicaba violar un código de moralidad de la época.
Este pequeño código suponía un problema para aquellos caballeros que necesitaban usar con libertad sus manos. Por eso algún sastre ingenioso tuvo la idea de incluir unas pequeñas aberturas en el extremo de las mangas. Los botones servían para abrirlas y cerrarlas. Si la situación lo exigía, los caballeros podían desabrochar los botones y remangarse de una forma discreta, ganando en comodidad y sin perder un ápice de elegancia.
Pero esta no es la única versión que existe sobre el origen de esos botones, existe otra que involucra a una de las mayores figuras de todos los tiempos: Napoleón Bonaparte. Cuenta la leyenda que su objetivo era evitar que los soldados utilizasen los puños de las mangas para limpiarse la nariz. Los botones metálicos provocaban que la sensación al hacerlo fuese realmente desagradable.
De cualquier forma, los botones ahora solo cumplen una función estética, aunque los haya de todo tipo, tamaño y color.
VoxBox.-