Para nosotras, hay muchos hechos que a nivel social no están vistos con buenos ojos y que a pesar del tiempo siguen pareciendo una herida que escuece en el costado.
Opinión.- Para nosotras, hay muchos hechos que a nivel social no están vistos con buenos ojos y que a pesar del tiempo, aunque hayan existido avances importantes como el voto femenino y otros no tan significativos a nivel histórico, como es la depilación desde las cejas hasta la punta de los deditos de los pies, siguen pareciendo una herida que escuece en el costado.
¿Qué pasa si una mujer va sola al cine? Están quienes pensarán: “Pobrecita, no tiene a nadie que la acompañe”; otros dirán: “Qué raro, tan bonita y que no tenga a nadie con quien ir”; y otros pocos, que dirán: “La verdad es que no necesita que nadie la acompañe para ir al cine”. Y así con ir a comer, a hacer diligencias, hacer ejercicio… Incluso aplica para cuando tienes 30 años y descubres que la verdad no quieres tener hijos, o no te quieres casar, o quieres obtener otro título universitario.
Pero ¿qué pasa si una mujer admite en público que se masturba? No lo hace debido a que es considerado un tema tabú por la sociedad y por eso se dan los casos de señoras que se reúnen con sus amigas de toda la vida, cincuentonas, hechas y derechas, que entre tema y tema les sale comentar que nunca han experimentado un orgasmo.
En conmemoración al pasado Día de la Mujer, y tomando en cuenta que dicho día debería celebrarse a diario, a continuación les presentamos un libro que puede llegar a ser la cereza del pastel en la vida de una mujer.
Sexo para uno, de Betty Dodson
Invita a las lectoras a cultivar la sexualidad femenina desde la hermosa comodidad de su mismo cuerpo, aprovechando la oportunidad para alejarse de tabús, aprender a querer su anatomía femenina tal y como es, coger algunos tips de cómo, cuándo y dónde, todo esto desde el punto de vista de la autora, que se desnuda ante nosotros para contarnos sus experiencias, que se enfrenta al mundo y a la crítica social hablando del tema “del que nadie habla”.
Sin embargo, a pesar de que parece un libro netamente femenino, no lo es. Se presenta la ocasión en algunos capítulos de conocer el punto de vista de los hombres y cómo la autora fue espectadora durante sus talleres de sexualidad, de la epifanía que tuvieron algunos hombres sobre sí mismos y sobre las mujeres, aquellas a las que tanto creían conocer, partiendo de que por probar una uva o cinco ya podían predecir cómo estaba el resto de racimo.
Un libro completo, de lectura ligera y agradable, que permite indagar en tu interior preguntándote: ¿Realmente me conozco? ¿Realmente conozco mi cuerpo? ¿Me quiero tal cual soy?
VoxBox.-