“Si he visto más lejos es porque estoy sentado sobre los hombros de gigantes”.
Isaac Newton
Cine – Abrí este artículo con la frase famosa atribuida a Isaac Newton, aunque alguien me puso a dudar si era del científico en cuestión, porque existen momentos en los que uno debe ser humilde y reconocer en la historia (colectiva y propia) que vamos más allá de nuestros propios talentos, gracias a los talentos de otras personas que nos han precedido.
Hidden Figures es la historia de tres mujeres afroamericanas que desde lo oculto, el silencio y la humildad abren paso a otras mujeres que vendríamos después. Es una película espectacular. ¡Ah, sí!, todo esto porque fueron parte importantísima y fundamental en el programa espacial de la NASA, justo cuando se quería poner en órbita al primer estadounidense.
En los años sesenta en Estados Unidos se llevaban a cabo varias luchas: la científica, la de los derechos civiles y la de los derechos de las mujeres. Todas estas luchas encuentran un punto de convergencia en la historia de Katherine Johnson (Taraji P. Henson), Dorothy Vaughan (Octavia Spencer) y Mary Jackson (Janelle Monáe). Al final es la historia de la reivindicación de las minorías, porque ¿qué podía ser más complicado en aquellos años que ser afroamericana, mujer y científica?
Tengo claridad que en medio de las luchas existen batallas estrepitosas y grandilocuentes, donde nacen los mártires y las grandes leyendas, pero también existen las batallas silentes y de lo cotidiano, donde nacen los grandes ejemplos. Así son estas tres mujeres que lucharon para que su trabajo fuera valorado y reconocido, para que pudieran tener acceso a la educación superior, para tener condiciones laborales dignas (desde un salario justo hasta el hecho de que tus compañeros hombres no crean que entras a la oficina a hacer aseo) y para que, desde el hogar, se respeten tus decisiones.
Posiblemente sea yo una romántica de las luchas. Sé reconocer una cuando la veo y lo que vi en esta película es precisamente un buen trecho del camino que llevamos muchos años recorriendo las mujeres.
Si, tenía razón Newton, hoy por hoy, las mujeres podemos ver mejores horizontes, gracias a que estamos sentadas en los hombros de estas mujeres majestuosas. Queda en nosotras seguir, tal vez no curaremos el cáncer, o inventaremos algo innovador, sino que simplemente en lo cotidiano daremos homenaje a estas mujeres… y quién sabe, a lo mejor… sí curemos el cáncer.
Y para cerrar: sí, quiero que Olivia Spencer se lleve el Óscar a mejor actriz de reparto.
VoxBox.-