Detalles.- Con 7 temporadas en su haber y una popularidad que ninguna otra serie del cable estadounidense había alcanzado antes, no es algo nuevo escuchar a algunos fans de The Walking Dead descontentos o decepcionados con el camino que ha tomado la serie, con la supuesta lentitud de algunos capítulos o con lo innecesario y absurdo de algunas tramas, pero hasta ahora todas esas quejas no parecían reflejarse en los ratings.
Al menos no a un nivel tan notorio como lo ha hecho ahora durante esta séptima temporada.
Los números de audiencia de The Walking Dead fueron aumentando sostenidamente desde el principio: la primera temporada tuvo un promedio de poco más de 5 millones de televidentes por episodio; en la siguiente, el promedio aumentó a casi 7 millones, a más de 10 en la tercera temporada y a alrededor de 13 y 14 millones respectivamente en la cuarta y la quinta.
Pero después de la temporada 5 de The Walking Dead se dio por primera vez un descenso en el promedio general de televidentes por episodios. Fue una caída mínima, no muy significativa, pero tal vez una señal de lo que sucedería ahora.
El ya famoso cliffhanger del final de la temporada 6, dio grandes resultados a la serie, al menos en términos de rating, ya que el episodio estreno de la temporada 7 de The Walking Dead, en el que se revelaron las víctimas de Negan, fue el segundo episodio más visto de toda la serie (17 millones de espectadores), solo por detrás del estreno de la temporada 5 (17.3 millones).
Pero desde ahí, los ratings comenzaron a desplomarse, con la caída más pronunciada desde que se emite la serie. Ahora, tras 6 episodios de la temporada 7, los niveles de audiencia son los más bajos desde 2013.
La reacción ante el episodio estreno fue bastante divisiva entre los fans, pero la magnitud de esta respuesta polarizada se evidencia con los números de espectadores.
De los 17 millones en el primer episodio de la temporada 7, se cayó a poco más de 12 millones en el episodio siguiente. Si 5 millones de personas decidieron no volver a la serie para el segundo episodio, queda claro que lo que sucedió en el estreno de temporada no agradó a muchos.
En los episodios que siguieron el rating siguió cayendo, hasta ubicarse apenas por encima del promedio de la temporada 3.
Este episodio más reciente, que gira completamente en torno a Tara y Heath, no parece ayudar demasiado.
Muchos están intentando buscar explicaciones para esta caída de los ratings.
Estas van desde la mencionada disconformidad ante el episodio estreno, pasando por la sensación acumulada de muchos fans de ser constantemente manipulados por parte de los creadores (la muerte/ no muerte de Glenn, la no revelación de las víctimas de Negan por 6 meses, etcétera), hasta el simple rechazo a un personaje como Negan o lo fragmentado de la acción en esta temporada, que tiene cada capítulo en una locación diferente y siguiendo a distintos grupos de personajes.
Su imparable crecimiento e impacto popular parecía blindado ante cualquier irregularidad (como sus cambios de showrunners) o sobresaltos creativos, con lo que tal vez sus creadores y productores se volvieron demasiado confiados y hasta descuidados.
VoxBox.-