Opinión.- He llegado a los 40 años. Admito que ha sido gracias a personas que me han cuidado: mi familia, mi esposo y mis hijos, los pocos (pero buenos) amigos que me quedan. Me han ayudado no solo a sobrevivir, sino que también han ido forjando a una persona que sigue en búsquedas y en construcción.
Contra todo pronóstico he superado miedos, operaciones y accidentes. Espero seguir haciéndolo. Me ha tocado aprender cada día, no me he aburrido y este año ha sido particularmente intenso en cambios, en aprendizajes y en relaciones (algunas personas siguen, otras al fin se fueron). Para mí es complicado hacer un recuento de sucesos sin música. Para mí la vida ha sido significativa gracias a la música que sonaba de fondo en mi cabeza: Amores, decepciones, trabajo, amistades, familia, dolores, miedos. Todo ha ido acompañado con música y así he sido feliz.
Lo admito, en algún momento pensé que no sería feliz. Resulta que la materialización de la dichosa felicidad es algo simple: vivir con lo que se tiene, con un poco de paz, con un poco de cólera, con un poco de alegría y un poco de lágrimas. Esa extraña combinación de elementos me ha llegado siempre, en cada etapa, y me ha hecho una mujer feliz. Feliz de escuchar siempre una tonada en mi cabeza.
Sin más, les dejo mi playlist para celebrar estos 40 años de vida, sabiendo que he sobrevivido y que seguiré así, hasta que la parca lo decida. Esta no pretende ser una lista con un criterio académico, es solo un recuento de mi vida:
3. So What – P!nk