Hay dos mundos que parecen profundamente irreconciliables: maternidad y porno. Pero no ha sido siempre el caso.
Tips.- Hay dos mundos que parecen profundamente irreconciliables: maternidad y porno. Pero no ha sido siempre el caso.
La verdad es que en la industria del porno ha existido siempre mucha hipocresía y sobre todo machismo: una de las categorías más populares de las búsquedas ha sido siempre la de “MILF”, pero a nadie se le ocurriría fantasear con una mujer cambiando pañales o preparando la cena.
Por eso acá te dejamos a estas tres mujeres que han superado el estigma social y han llevado una feliz vida en familia, a pesar de ser actrices porno:
Nina Elle
Hoy en día Nina Elle se describe a sí misma como “una rubia guapa con los pechos grandes”, pero no siempre utilizó su físico para mantener a su familia. Antes se ganaba la vida trabajando como higienista dental, pero cuando supo lo que ganaban las actrices porno se dio cuenta de que no podía desperdiciar esa oportunidad. Para ella, actuar en películas porno significaba ganar lo suficiente como para pagar las clases de canto y de ballet para su hija de cinco años, y comprar las Nike que quería su hijo de 11 años.
Cuando empezó su carrera en de actriz porno sabía que debía mantener en secreto que tenía una familia, pero después de un tiempo decidió revelar su vida privada, para intentar corregir algunas ideas equivocadas sobre la maternidad en la industria del porno.
“Puedes ser mejor mamá, porque tienes una mente más abierta”, dice Nina. “Las cosas no me van a sorprender tanto. Como ya he visto y hecho muchas cosas, cuando mis hijos las hagan, no me voy a asustar”.
No obstante, Elle aún no ha revelado su profesión a sus hijos. Como su hijo está empezando a utilizar las redes sociales, a Nina le preocupa que se tope con la cuenta que utiliza para interactuar con sus fans: “Lo bloqueé y le prohibí abrir una cuenta hasta que cumpliera 16 o 17 años”, cuenta Nina. “Él simplemente dijo: ‘Por Dios, mamá, estás actuando de una forma muy rara’”.
Alana Evans
Alana Evans ha trabajado en la industria del porno durante más de 15 años. Cuando no está en el plató, Alana prefiere hornear galletas y jugar con videojuegos junto a sus hijos. Desde su punto de vista, su familia representa los valores tradicionales, los cuales, según ella, motivaron a su hijo para que se uniera a la Marina.
“Me gusta pensar que mi hijo es así gracias a la educación que le inculqué”, dijo Alana. “Siempre tenemos mucho cuidado con las películas y las revistas porno en casa. Somos padres modelo debido al estigma social”.
Alana siempre supo sobre el estigma social. Su exesposo es policía y cuando la hija de su supervisor salió en Playboy, él y sus compañeros decoraron la oficina del jefe con páginas donde salía la imagen de su hija desnuda.
Aurora Snow
La vida de Aurora Snow nunca ha sido fácil. Y a pesar de que ha sido juzgada mil veces por la sociedad, siempre se ha preocupado por el bienestar de sus hijos. Snow ya se ha retirado del mundo del porno, pero contó su historia en un ensayo para The Daily Beast.
“Los padres en el entretenimiento para adultos deben enfrentarse a construir una pared que separe su trabajo de su vida en el hogar. Más secretos, menos conversación. Y los niños tienen muchas preguntas. ¿Cómo le explicas a un inquisitivo chico que el sexo es un acto íntimo, importante, sagrado, que se comparte con quien amas, y sin embargo para mamá es un trabajo?”, aseguró Snow. “Como mamá, nunca sentí que podría explicar la hipocresía de mis sentimientos. Ahora estoy aquí: una estrella porno retirada en una relación amorosa, monógama y con un pequeño hijo. Todavía estoy pensando cómo tener esas conversaciones después en la vida”.
VoxBox.-