Si los hallazgos del estudio son correctos, eso quiere decir que TRAPPIST-1h, podría ser capaz de albergar océanos.
Noticias.- Hace casi una semana pudimos conocer la existencia de un sistema estelar a 39 años luz de distancia, el cual alberga 7 planetas similares a la Tierra, tres de los cuales se encuentran en la zona habitable. Los científicos han anunciado que un cuarto planeta también podría ser habitable, si consideramos otras condiciones.
Nuevos modelos de la Universidad de Cornell sugieren que la llamada zona habitable, esa en la que los planetas pueden albergar agua líquida o, incluso vida, podría ser más amplia de lo que imaginamos, si consideramos al hidrógeno volcánico (H2) como un gas invernadero con el potencial para calentar el clima. Los planetas cuyas atmósferas son calentadas por H2 (en lugar de CO2) se mantienen habitables en órbitas con distancias mucho más amplias. Además, podría ser más fácil detectar la presencia de vida gracias a estas atmósferas.
Si los hallazgos del estudio son correctos, eso quiere decir que TRAPPIST-1h (el planeta más lejano de los descubiertos en esta estrella, que actualmente es considerado un exoplaneta helado), podría ser capaz de albergar océanos. “Los planetas de TRAPPIST son realmente fríos”, Ramses Ramirez, investigador principal del estudio publicado en el Astrophysical Journal Letters. “Tres de ellos se encuentran en la zona habitable, pero si tomamos en cuenta al hidrógeno podríamos tener un cuarto planeta habitable”.
Los astrónomos definen la zona habitable dependiendo de dos moléculas relacionadas a la vida en la Tierra: dióxido de carbono y agua. Según esta definición, la energía solar es tan escasa en la región externa de la zona habitable que el CO2 se congela, como sucede en Marte. En cambio, en la región interna la temperatura está por encima del punto de evaporación, lo que quiere decir que es muy caliente y los océanos pueden evaporarse, provocando un efecto invernadero acelerado. Esto podría haber sucedido en Venus hace muchísimo tiempo.
Sin embargo, ¿acaso solamente deberíamos tomar en cuenta dos gases invernaderos (C02 y agua) cuando hacemos pruebas de habitabilidad en los miles de millones de sistemas estelares que existen en nuestra galaxia? Quizás no. “Otros gases de efecto invernadero podrían extender la zona habitable”, mencionan Ramirez y Lisa Kaltenegger, coautora del estudio.
Uno de esos gases es el hidrógeno. Hace años los científicos propusieron que los planetas con atmósferas gruesas y llenas de H2 podían mantener la temperatura lo suficientemente cálida como para soportar agua líquida, incluso a una distancia de hasta 10 UA (unidades astronómicas), la misma que tiene Saturno con respecto al Sol. No obstante, ¿puede un planeta rocoso mantener una atmósfera rica en H2 durante los miles de millones de años necesarios para que la vida evolucione? Después de todo, el H2 es una molécula extremadamente liviana que puede escapar hacia el espacio.
En los planetas con atmósferas ricas en H2 podría ser más fácil detectar “biofirmas”. “El H2 es un gas muy liviano”, explicó Ramirez. “Esto podría hacer que sea mucho más fácil detectar vida en planetas como estos”.
“Durante mucho tiempo nos hemos centrado en buscar solamente planetas demasiado similares a la Tierra, enfocándonos en el CO2 y el agua. Es ingenuo pensar que todos los planetas habitables tienen que ser como el nuestro no sabemos si eso es así», aseguró Ramírez.
Es posible que la vida en otros planetas sea bastante similar a la de la Tierra, pero quizás no. Y si no es el caso deberíamos estar abiertos a otras posibilidades.
VoxBox.-