Milán Kundera tiene ese poder de filosofar con los detalles, que en cualquier otro autor podrían parecer nimios. Él los explota y les da un sentido diferente.
Previo: La identidad de uno en una pareja
Opinión.- Creo que es inevitable que en una relación amorosa duradera (me refiero a más de seis meses) alguna de las dos personas (o las dos) pierdan su identidad. Sucede que se amoldan tanto a la personalidad del otro que olvidan sus propios gustos o motivaciones, lo cual no creo que esté enteramente malo: si así eres feliz, amoldándote a otro ser y olvidando lo que en verdad te gusta, es tu decisión.
En las relaciones actuales hay ciertas metodologías para no perder la identidad. Algunas de estas pueden (y deberían) ser: salir con tus amigos por lo menos una vez a la semana, tener un pasatiempo exclusivo, oír música diferente (no del todo diferente) y tener tiempo de calidad contigo mismo, y lo que llamaríamos un comodín (ir al museo, al cine, por un libro, por un café, pero totalmente solos).
¿Qué les parecen estas medidas para no perder la identidad? ¿Les agradan? ¿Les disgustan? ¿Las aplican o las han aplicado?
Reseña
Jean Marc y Chantal son una pareja medianamente feliz que vive en París. Su vida transcurre con calma y en apariencia tranquila. Hasta que un día Chantal ya no se siente lo suficiente atractiva como para conseguir las miradas de los hombres. A partir de este momento, Jean Marc intentará hacer que se dé cuenta que él sí se desvive por ella.
Chantal recibe una misteriosa carta de un admirador secreto, que le dice que la observa constantemente. Ella no sabe muy bien cómo reaccionar, y se debate entre guardar la carta, mostrársela a Jean Marc o destruirla. Al final tomará la peor decisión posible.
A través de la radiografía de una pareja en decadencia y que ha perdido la parte del yo, se presenta La identidad, un libro que va del amor melancólico. Kundera escribe para el amor, el desamor, el desequilibrio y la falta de identidad, así que tómelo cuando usted más lo necesite.
Opinión
Me puse a leer varias contraportadas de los libros de Kundera y este fue el que más me convenció: una vez más, bien aplicada la regla de que los libros te encuentran a ti en el momento que más los necesitas. El primer día me leí más de la mitad del libro, pero quise darle un pequeño respiro.
Kundera tiene ese poder de filosofar con los detalles, que en cualquier otro autor podrían parecer nimios. Él los explota y les da un sentido diferente, les da un sabor. Más que en las situaciones, se enfoca en los detalles. Digamos que comprendiendo los detalles se desatan las situaciones.
No es el romanticismo que todo mundo lee, sino algo más melancólico y real. Cómo una pareja ha perdido su identidad, y cómo de un malentendido (carente de comunicación) todo se tergiversa y toma acciones drásticas (quién sabe dónde habrá sucedido eso).
Disfruté mucho la primera parte, en la cual surge la crisis, y es que la fémina cree que ya no atrae la mirada de los hombres, y su hombre quiere hacerle dar cuenta que él daría todo su mundo por mirarla todo el tiempo. El final y las últimas quince páginas son las que merecían cinco estrellas, y a diferencia de la gran mayoría, que no están complacidas por ese tipo de finales, yo sí. Al menos con este, sí.
Los personajes, aunque son mayores, me parecen bobos, nunca se dan cuenta de la necesidad de su pareja. ¿Por qué? Por el simple hecho de que han perdido su identidad y necesitan recuperarla… o hablar.
¿Puedo volver a recuperar mi identidad, si la he perdido?
Título: La identidad
Autor: Milán Kundera
Editorial: TusQuets
Género: Misterio, Ficción/Romántico
País donde sucede: Francia
País de origen del autor: República Checa
Año de publicación: 1997
Páginas: 178
Días para acabarlo: 3
Calificación personal: 4.6/5
VoxBox.-