Definitivamente nos encontramos en una era en la que trabajar para un formato de serie televisiva nunca ha sido tan sexy.
Opinión.- En un capítulo Dawson’s Creek, el protagonista principal de la serie de televisión hace una reflexión sobre la supremacía del cine sobre, precisamente, el medio televisivo. Básicamente su argumento principal era que el primero era un medio en una constante búsqueda de adquirir un valor artístico que plasmara la visión e ideas de un director. Nos enfrentamos dos medios que, aunque parecidos, son diferentes.
El cine posee un estilo y atmósfera particular, sumado a una historia concreta dentro de un inicio-desarrollo-cierre. Mientras que “la caja boba” buscaba crear dramas sosos de una hora de duración sin ningún tipo de desarrollo concreto o personalidad, eran producciones blandas al no poseer unas cualidades estéticas propias.
Un momento muy meta (considerando que fue una reflexión que vino precisamente de un drama televisivo), pero no del todo alejado de la realidad. Durante años hemos presenciado cómo series televisivas de formato semanal fácilmente han alargado de más su estadía, perdiendo su esencia o simplemente han desgastado su fórmula de “monstruo semanal”, o se aprovechan en exceso de “la tensión sexual no resuelta”. En fin, se vuelven tramas reiterativas y más complicadas de lo necesario.
Sin embargo, si usáramos hoy en día este argumento podría ser fácilmente anulado, pues es innegable que hay series que aprovechan mucho mejor su formato para crear historias con verdadero desarrollo y evolución en sus personajes, es más pausado que el cine pero aún sigue siendo verosímil, incluso más que lo que se plantearía en una película de solo dos horas.
Este crecimiento del medio televisivo no solo es visible en sus guiones, sino también en la propuesta de dirección. Ya no se limitan a contar todo a través de un estudio con tres cámaras simultáneas siempre en la misma posición, sino que podemos ver transiciones complejas, planimetría arriesgada y un diseño de producción más realista.
Quizás muchos concuerden que todo comenzó con propuestas como The Sopranos, que además gozaba de influencias cinematográficas, pero hoy en día ya es común ver series con estos mismos estándares de calidad. Breaking Bad quizás sea la Mágnum Opus que reivindica a las series y que además es capaz de ser equiparable o incluso llegar sobreponerse a una película.
Pero existen otros ejemplos: la adaptación de Game Of Thrones es obvio que es superior a cualquiera que se hubiera podido hacer en la pantalla grande. Gracias a HBO pueden ser tocados temas más escabrosos sin riesgo a la censura, historias concretas en temporadas temáticas y actores de alto calibre como en True Detective o Newsroom.
En el caso de Newsroom, se cuenta con la particularidad de estar escrita por un solo guionista a cargo, a diferencia de un departamento completo de personas, como tiende a ser lo común para una serie: Aaron Sorkin fue el creador y único supervisor creativo.
Por otro lado, la modalidad de Netflix como plataforma online sin cortes comerciales y disponibilidad total del contenido para los usuarios hace que Stranger Things y muchas otras propuestas puedan ser vistas de forma continua, como si se trataran de películas de 10 horas.
Directores de cine como Martin Scorsese ya han coqueteado con proyectos televisivos, y todo parece ir en esa dirección. El Showrunner goza ahora de un control creativo envidiable en cualquier medio, aunque en Gran Bretaña casi siempre ha gozado de tener “guionistas jefe de temporada”, haciendo que la calidad de sus historias sea mayor por lo general. Incluso así los británicos han logrado a superar aún más sus propios límites como con Sherlock.
Definitivamente nos encontramos en una era en que trabajar para un formato de serie televisiva nunca ha sido tan sexy… demuestra que aún existe un futuro para dejarse impresionar por lo que nos tiene preparada la pantalla chica e incluso aún más chica, gracias a plataformas de streaming. Así que quién sabe cuál sea el siguiente paso: solo el tiempo y nuestras formas de encontrar entretenimiento lo dirán.
VoxBox.-