Detalles.- El digital El Comercio se lo preguntaba hace unos días: ¿Se comprobará en 2018 la existencia de la materia oscura? ¿Se avanzará en la carrera por enviar el primer ser humano a Marte? El conocimiento no para nunca, Y por eso acá te traemos lo más importante de la ciencia en 2018.
La primera foto de un agujero negro
Si 2017 fue el año de la gestación, 2018 será el del alumbramiento de la primera foto jamás capturada de un agujero negro. En el año que terminamos, una red de radiotelescopios en Hawái, Arizona, Chile, México, España y la Antártida, han convertido el planeta Tierra en el Event Horizon Telescope (EHT), un enorme observatorio virtual para obtener una imagen de Sagitario A, el agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea. Según lo previsto, la imagen mostrará una nube de gas caliente y brillante girando alrededor del horizonte de sucesos, esa frontera de la cual ni siquiera la luz puede escapar.
Dentro de unos meses podremos contemplar una imagen que no solo se convertirá en uno de los mayores hallazgos científicos de 2018, sino que marcará un hito en la astronomía.
Misiones espaciales para todos y exoplanetas
La reciente directiva firmada por Donald Trump, para preparar el regreso de los astronautas estadounidenses a la Luna, ha reavivado el interés en la exploración espacial tripulada. Sin embargo, a la NASA aún le quedan por delante de tres a cinco años para estrenar su nueva plataforma de vuelos tripulados, el Space Launch System y la nave Orión. Mientras, los operadores privados podrían adelantarse en 2018 con sus primeros viajes tripulados. La Dragon 2 de SpaceX debería despegar en abril con un viaje sin tripulación a la Estación Espacial Internacional, para seguir en agosto con un vuelo de demostración tripulado.
Además, la búsqueda de exoplanetas que estén a no más de 300 años luz de la Tierra y la misión Solar Probe Plus, que se acercará como nunca al Sol, serán solo dos de los acontecimientos del año. La India lanzará una secuela de su misión lunar Chandrayaan. La NASA enviará la InSight a Marte, para estudiar su subsuelo. La nave japonesa Hayabusa 2 llegará al asteroide Ryugu y La Osiris Rex, de la NASA, recogerá muestras del asteroide Bennu y las traerá a la Tierra. En octubre partirá la primera viajera a Mercurio, BepiColombo.
El año de los asteroides
En el ámbito de la exploración espacial con sondas robóticas, 2018 será el año de los asteroides. Dos misiones, una japonesa y otra estadounidense, llegarán el próximo verano a sus objetivos respectivos, dos rocas espaciales de las que ambas arrancarán muestras de material, con el fin de traerlas de vuelta a la Tierra para su análisis. La sonda japonesa Hayabusa 2 llegará en julio a su destino, el asteroide 162173 Ryugu, mientras que la OSIRIS-REx de la NASA se encontrará en agosto con 101955 Bennu. No obstante, aún queda una larga espera hasta tener ambas sondas de vuelta en la Tierra: la japonesa regresará en 2020 y la estadounidense en 2023.
El año nuevo traerá otras misiones espaciales de gran interés. La Agencia Europea del Espacio (ESA) y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) lanzarán en octubre la BepiColombo, que tomará el relevo de la estadounidense MESSENGER en la exploración de Mercurio. Las dos sondas que conforman la misión deberán recorrer un largo camino, pasando por la Luna y Venus, antes de llegar a su destino en 2025.
Por su parte, la NASA tiene este año su lanzamiento más destacado en mayo, el de la misión InSight, con destino a Marte. En noviembre esta sonda fija de superficie se unirá a las dos de la NASA aún activas en suelo marciano (Opportunity y Curiosity), para estudiar la geología de Marte. Por último, y después de que en 2017 se frustró el lanzamiento de la misión lunar Chang’e 5, China confía en lanzar este año la Chang’e 4, que se convertiría en el primer artefacto de la historia en la cara oculta de la Luna.
La medicina genética
La edición del genoma tiene la capacidad de alterar radicalmente la forma en que tratamos las enfermedades, pero tiene algunos riesgos.
En esencia, el proceso nos permite reemplazar un gen defectuoso con uno sano, o incluso editar el gen para hacer que se comporte de manera diferente.
Es un “impacto de la ciencia biológica, que tiene ramificaciones tremendas y potenciales”, asegura Sir John Skehel, de la Royal Society de Londres.
El alcance de tratamientos para condiciones heredadas genéticamente es claro. Si los científicos pueden editar los genes para quitarles errores heredados, y entonces pueden detener el desarrollo de esas condiciones.
La computadora cuántica
La carrera por construir una computadora cuántica se largó a mediados de la década del 90. Es probable que 2018 sea el año en que se establezca la Supremacía Cuántica; es decir, que se construya un dispositivo cuántico capaz de resolver un problema que no puede ser resuelto por las máquinas usuales. Este dispositivo solo será capaz de encontrar la solución de un pequeño conjunto de problemas matemáticos.