Noticias.- Desde su exilio y en un estado de salud que se ha llegado a considerar delicado, Julian Assange continúa siendo relevante para la agenda política de los Estados Unidos y el mundo, amenazando ahora con la liberación de documentos referidos a Hillary Clinton y Donald Trump cercano a la fecha de las elecciones presidenciales.
Se habla de más de un millón de documentos que no se limitan a difamar a Trump o Clinton específicamente, sino más bien volver a abrir los ojos del mundo sobre las prácticas políticas de todos los involucrados en el gobierno.
Desde la próxima semana y hasta el final de año, estos documentos comenzarán a filtrarse en varias tandas, que aumentan la expectativa y efervescencia que se vive en clima electoral. Por si fuera poco, el líder de WikiLeaks aseguró que la organización se está actualizando, y no solo cambiará su operativa sino que ampliará su área de trabajo a más de 100 medios que oficializarán el trabajo colaborativo que han venido teniendo hasta ahora.
Aunque su situación personal sea delicada en términos legales, nada le impide continuar amenazando a las altas esferas con la liberación de información clasificada. Y a juzgar por el impacto que tuvieron sus apariciones pasadas, seguramente ninguno de los candidatos pueda estar tranquilo en esta recta final hacia la Casa Blanca.
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