Rossemberg Rivas es uno de los diseñadores centroamericanos más conocidos en el mundo entero. Sin embargo, un medio salvadoreño decidió desacreditarlo.

Detalles.- Rossemberg Rivas es un diseñador salvadoreño de espectáculos. Nació en San Salvador, El Salvador, el 31 de octubre de 1980.

Es diseñador de profesión, pero desde pequeño se inclinó por la música, las artes plásticas, el teatro, el ballet y la fotografía.

Sus trabajos le han llevado a incursionar en el espectro del espectáculo de su país, a través de escenografías y vestuario para teatro, danza contemporánea, conceptualización de performances, happening y el cine.

Rivas cuenta con una especialización en Diseño de vestuario para espectáculos, del Fashion Institute of Tecnology, en Nueva York.

La hoja de vida

Rivas ha realizado aportes conceptuales sobre la comunicación en la creación de espectáculos, que le ha permitido tocar escenarios internacionales como el Cirque du soleil, el evento internacional Hollywood Designning Awards en New York y el Carnaval de Rio de Janeiro, influenciando todo esto su trabajo en su país y a nivel centroamericano como caracterizador escénico, director artístico, escenógrafo y diseñador de vestuario para espectáculos.

El salvadoreño también se convirtió en el primer diseñador extranjero en trabajar con el famoso cabaré Tropicana, en Cuba. El show, que tiene 77 años de producirse, cuenta con la participación de unas 200 estrellas y bailarines internacionales. Se considera uno de los espectáculos más icónicos del cabaré cubano y del mundo. Cada show dura dos horas, distribuido en 32 escenas diferentes.

Rivas atribuye su éxito internacional a los procesos intelectuales: “Detrás de cada elemento en mis eventos hay una justificación y un proceso intelectual que lo respalda. Hasta las flores en mis eventos tienen una justificación”.

Pero nada de eso era suficiente

Para este medio salvadoreño, las credenciales artísticas y el respaldo internacional no fueron suficientemente importantes, como para detallarlo en una nota que hablaba sobre el nombramiento de Rivas como embajador de Marca País.

Lo más importante era generar morbo por la vida privada del artista con este lamentable titular:

Lo irónico de la situación es que Marca País tiene por objetivo fortalecer el posicionamiento de El Salvador como punto para promover inversiones, exportaciones y el turismo, y mostrarle al mundo el orgullo de ser salvadoreño. Pero en El Salvador como en Centroamérica, ser diferente no es nunca motivo de orgullo. Ni siquiera cuando se tiene un currículo como el de Rossemberg.

Por si el titular no quedaba suficientemente claro, el primer párrafo del texto se asegura de zanjar cualquier duda sobre la identidad sexual del artista:

Probablemente la intención de este medio no sea otro que el de generar clicks en su sitio. A diferencia de lo que se cree, generar clicks es una aspiración completamente legítima (si han llegado hasta aquí en esta nota, es muy probable que quien escribe pueda alimentar hoy a su familia).

Sin embargo, minimizar de esa forma tan ruin el trabajo y la trayectoria de un artista para tener más lectores (por no mencionar las implicaciones homofóbicas del asunto) debería ser una práctica que quede bien enterrada, en lo más profundo del panteón de la idiotez humana, en el mismo féretro donde descansen por fin en paz los medios tradicionales.

VoxBox.-