La modelo británica Chloe Ayling contó cómo fue secuestrada en Italia por unos sujetos que cubrían sus rostros, quienes luego trataron de subastarla en la red.
Detalles.- Chloe Ayling, una modelo británica de 20 años, ha regresado al Reino Unido luego de su calvario y dijo que temía por su vida “segundo a segundo, minuto a minuto, hora por hora”.
La modelo había sido enviada por su agente a una sesión de fotos en Milán, en julio, pero fue secuestrada por un sujeto que se hizo pasar por fotógrafo, quien la mantuvo en cautiverio durante una semana en la pequeña aldea de Borgial, cerca de la frontera con Francia.
El secuestrador, identificado como Lukasz Pawel Herba (de 30 años), afirmó ser parte de una organización llamada Black Death y amenazó con venderla en la deep web, si su agente no pagaba un rescate de USD 300,000.
El hombre, de nacionalidad polaca y que vive en Reino Unido, fue arrestado por la policía y confesó haber realizado el secuestro, descrito por las autoridades policiales como un complot que involucró meses de planificación.
El testimonio de Ayling
Desde la puerta de la casa de su familia en el sur de Londres, Ayling dijo: “He pasado por una experiencia aterradora, temí por mi vida, segundo a segundo, minuto a minuto, hora por hora”.
Ante los policías, ella brindó un aterrador relato de lo que le sucedió cuando se presentó a la sesión de fotos, en un estudio cerca de la estación central de Milán, el 11 de julio.
“Una persona que llevaba guantes negros vino por detrás y me puso una mano en el cuello y otra en la boca, para que no pudiera gritar”, contó la mujer a las autoridades.
“Una segunda persona que llevaba un pasamontañas negro me puso una inyección en el antebrazo derecho. Creo que perdí el conocimiento. Cuando me desperté, tenía puesto un traje rosa y los calcetines que llevo ahora”, agregó.
“Me di cuenta que estaba en la maletera de un vehículo, con mis muñecas y tobillos esposados, y cinta adhesiva en mi boca. Yo estaba dentro de una bolsa y solo podía respirar a través de un pequeño agujero”, detalló la modelo.
Asimismo, dijo que había por lo menos tres cómplices que usaban pasamontañas, aparte de Herba.
Mientras la conducían a una remota casa a 120 millas de Milán, la modelo gritaba tanto que los secuestradores se vieron obligados a detener el vehículo varias veces. Agregó que estuvo esposada en la vivienda por el falso fotógrafo y por lo menos un cómplice. “Me observaron, me impidieron huir y amenazaron con matarme si lo hacía”.
Señaló que, durante su cautiverio, sus captores habían amenazado con subastarla en la deep web por USD 350,000, pero uno de ellos, que se cree era Herba, se le acercó con un pasamontañas para decirle que habían cometido un error al secuestrarla, porque era la madre de un niño pequeño, y la organización Black Death, para la que trabaja Herba, excluía a las mujeres que fueran madres, de acuerdo con el Telegraph.co.uk.
Finalmente, el sujeto fue capturado cuando llevó a la modelo al consulado británico de Milán, y según la policía confesó el crimen.